Relatar la historia de la calle Ayacucho, es evocar la vida de tres distintos siglos del distrito de Barranco.
Las residencias que se construyeron sobre la pequeña vía, y las edificaciones realizadas en el acantilado con destino a la Bajada de los Baños.
El sendero, al parecer fue habilitado hacia mediados del siglo XIX, iniciándose como un ramal de la calle Domeyer, hacia la izquierda, pero a los pocos metros giraba hacia la derecha, como yendo hacia el acantilado, para volver a girar hacia la derecha, sector que sería el inicio de la calle Castilla (o Malecón Castilla).
En la zona, ya estaba delimitadas totalmente las calles Domeyer, Sucre, la Bajada de los Baños, y tres pequeños senderos, que serían el actual camino entre Iglesia y el parque Municipal, el principio de la primera cuadra de la avenida Pedro de Osma, y la calle Zepita.
Hacia la década de 1890, se habían edificado sólo un par de predios en dicha calle, una muy pequeña ubicada en la primera cuadra y otra muy amplia en la segunda, muy cerca a la calle Castilla, la cual se mantiene a la fecha.
Por los mismos años, se construyó otra residencia al lado derecho de la edificada en el siglo XIX, predio que aún existe, pero que se encuentra en muy mal estado de conservación.
A principios del siglo XX, en toda la primera cuadra de la calle Ayacucho se habían edificado residencias, las cuales formaban parte de un terreno ubicado entre las calles Domeyer, la Av. Bolognesi (hoy Av. Grau), el área donde actualmente se encuentra la actual Parroquia La Santísima Cruz de Barranco, la avenida De Osma y la calle Zepita.
La mayoría de esos predios desaparecieron en la década de 1940, con la ampliación de la avenida Prolongación San Martín.
Hacia la década de 1920, se construyeron varias de las residencias en la segunda cuadra de la calle Ayacucho, las cuales aún se mantienen.
Al igual que una amplia residencia ubicada en la primera cuadra, en esquina de la calles Ayacucho y Zepita, que limita a unos metros del inicio del Puente de los Suspiros.
Por esos años, ya se había habilitado el sendero de escaleras, conocido como la Bajada La Oroya.
Al año 1935, la edificación de viviendas por todo el distrito de Barranco era masiva, añadiendo un par de predios a esta hermosa calle.
Pero después del terremoto de 1940, toda esa zona sufrió mucha alteraciones, principalmente por la habilitación de la nueva vía vehicular de la avenida Prolongación San Martín, gracias al puente de cemento, así como la expropiación de varios predios ubicados entre la avenida Pedro de Osma, con la finalidad de tener un acceso hacia la calle Castilla, hoy malecón Castilla.
Toda la zona donde actualmente se encuentra la Municipalidad de Barranco fue demolida y convertida en un amplio parque.
Hasta mediados de la década de 1960, en que se decidió instalar ahí el local municipal.
Según el letrero de identificación de las calles, el nombre de esa calle es Jr. Batallón Ayacucho, sin embargo también dice que se llamaba Alfredo Levy Rendón, y, Pedro Roselló.
A finales del siglo XX, el jirón Zepita, recibió el nombre de Paseo Chabuca Granda.
Hacia mediados del siglo XX, en la segunda cuadra de la calle Ayacucho, se edificaron varias casas sin algún valor patrimonial.
Uno de los más antiguos predios se encuentra casi al final de la segunda cuadra, con el título de "Villa Teresa, fue construido hacia la década de 1870, con el título de finca-rancho.
Pero si desea disfrutar de un hermoso panorama, desde el acantilado de la calle Domeyer, tiene acceso a observar las curiosas edificaciones que quedan del siglo XIX y de principios del siglo XX, de la calle Ayacucho.
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| Vista desde el Mirador Recavarren |
Muchas de las cuales, han ampliado sus recintos hacia el acantilado.
La calle Ayacucho la atraviesa la calle Zepita, que se inicia en la avenida Pedro de Osma y culmina en el Puente de los Suspiros.
Ese es también otro hermoso un hermoso sendero de libre acceso.
Están cordialmente invitados a disfrutarlos.
Antigua vista de las dos cuadras de la calle Ayacucho, uno de los senderos más antiguos y pintorescos del distrito de Barranco, cuyo lado derecho de la primera cuadra, fue casi en su totalidad, ladera de la Bajada de los Baños, y sólo fue habilitado un pequeño triángulo al lado izquierdo, para edificar (al parecer) un par de residencias, las que fueron reemplazadas por el actual local municipal.
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