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martes, 22 de noviembre de 2022

Alameda Saenz Peña en Barranco II


La Alameda Sáenz Peña, se empezó a habitar hacia principios del siglo XX, según los planos, era ruta de un canal de regadío, y sus áreas siempre lucían plenas de vegetación.

Se encuentra ubicada entre la avenida Grau, y las calles Pérez Roca por el lado norte y Martínez de Pinillos / Carlos Zegarra por el sur, y con la Glorieta del malecón Sousa por el Oeste.

Se inicia con una base en el centro del jardín, donde colocaron una placa recordatoria de cuando realizaron una importante refacción, hacia la década de 1980.

La cual se encuentra a pocos metros de la pista de la avenida Grau.


Una de las casas más modernas es la ubicada justo en la esquina, cerca de la calle Cajamarca, porque la otra residencia cercana a la esquina de la calle Miraflores, fue demolida.

Toda la alameda tiene un pequeño declive imperceptible, por ello al llegar a la Glorieta es preciso descender algunas gradas. A un lado de la Glorieta, se encuentra el parque Berkemeyer.

La Alameda fue diseñada  con el mismo estilo que el Paseo Colón, del cercado de Lima.

Hacia la década de 1920, ya existían al menos media docena de residencias, la mayoría con amplios jardines alrededor.


Hasta mediados del siglo XX, fue un lugar con la más hermosa reunión de residencias, la mayoría de estilo francés. 

El nombre de la alameda fue asignado por el general argentino Roque Sáenz Peña, quien participó en la Guerra del Pacífico (1879).

Don Roque Sáenz Peña participó en la batalla de Tarapacá así como en la batalla de Arica estando al mando del batallón Iquique, después de ser herido cayó prisionero por el ejército chileno, siendo prisionero por seis meses.

En el año 1922, se colocó el obelisco a San Martín, en el centro de la Alameda y de la pista de la avenida San Martín


En la Alameda Saénz Peña, residían familias acaudaladas, que habían decidido instalar sus viviendas en el distrito de Barranco, por haberse convertido en el barrio de moda.

Hacia finales de la década de 1930, las dos primeras cuadras estaba totalmente edificadas, manteniéndose a la fecha la mayoría de estas, por ser considerado Patrimonio del distrito de Barranco.

Sin embargo, hasta casi mediados del siglo XX, todas esas residencias, se abastecían de agua, mediante un sistema de pozos de agua y molinos.


Los diseños arquitectónicos  de cada una de las residencias es totalmente distinta a la casa vecina.

Por ello al admirar las construcciones, pareciera que viajara a cada uno de los lugares donde esas edificaciones fueron originarias.

Encontrará estilo renacentista, republicano, morisco, victoriana, clásica, Art Nouveau, moderna de la escuela alemana de diseño, la Bauhaus,  y las últimas edificaciones son minimalistas.


Las áreas verdes tanto de las bermas laterales como central, siempre están muy bien cuidadas, con diversas flores, arbustos y árboles.

Yo acostumbraba pasear por la Alameda Roque Sáenz Peña, durante mi niñez y juventud, por ello uno de las estrofas de mi poema titulado "Barranco", evoca aquel hermoso lugar, en especial porque en la zona siempre había palomas picoteando la vereda.

Hacia la década de 1970, demolieron una hermosa residencia de dos niveles, para edificar un edificio de siete niveles que malogró toda la belleza arquitectónica de la Alameda.


En esa misma década, se empezó la construcción de un edificio de departamentos hacia el final de la alameda, entre la calle Tacna y el malecón Sousa, construcción que se mantuvo paralizada durante casi 30 años, hasta culminarla, sin ningún detalle similar a la belleza de todas las otras casas vecinas.

En la década de 2010, por alguna extraña razón se permitió la construcción de un edificio de ocho niveles, con varios sótanos, que también destruye la armonía arquitectónica de este hermoso lugar.


Esa construcción fue realizada en los jardines, en alguna época intangibles, de una residencia ubicada en la tercera cuadra de la Alameda, en esquina con la calle Tacna.

Otras dos extrañas edificaciones se han realizado en esta alameda, hermosas residencias fueron demolidas para construir horribles edificios, sin algún valor arquitectónico, además de ello, son departamentos que malogran la perspectiva de la Alameda.


Sin embargo, si se han mantenido y cuidado diversas estatuas, que permanecen por décadas en el mismo lugar, en especial, aquella en homenaje al dios Neptuno. Así como varios adornos ubicados dentro de los jardines, como estas esculturas, refugio de las palomas.

Era también mi ruta para ir a la playa Barranquito, justo por el acantilado, ya que gracias al sendero aplanado por los bañistas, era muy sencillo descender por ese  cerro, prácticamente se hacía en 5 minutos,  y dependiendo del tránsito, se requerían dos minutos más para llegar a la arena.

En la Alameda existen negocios de galerías de arte, centros de enseñanza, teatros, universidades, embajadas, hoteles, venta de productos diversos, y otros locales comerciales, así como diversas viviendas.


Ninguno de esos negocios tiene habilitado áreas de estacionamiento, lo cual perjudica la viabilidad vehicular y peatonal de la zona.


El lugar debe haber sido muy hermoso, porque a pesar de todas estas transgresiones al valor patrimonial, el lugar continúa siendo muy bello.

Sean los meses de invierno, otoño, primavera o verano, siempre será un deleite caminar por la Alameda Sáenz Peña.


Guardé para el fin esta fotografía, para demostrar cómo era la residencia que se encontraba donde actualmente está el horrible edificio de 7 pisos, construido a principios de la década de 1970, pero las construcciones sin valor arquitectónico continuaron.




Reuní fotografías de terceros y mías, para recrear lo que fue y es la hermosa Alameda Saenz Peña.
Con el deseo de haberlas colocado en orden, las comparto.
Un abrazo Barranquino.


martes, 15 de noviembre de 2022

SJC 3 Recuerdos: los uniformes


Mis recuerdos vividos durante los últimos cinco años de estudios son más fácles de evocar, fueron tiempos en que se consolidan las amistades, descubrimos nuestros principales intereses, y hasta nos enamoramos.

En el colegio San José de Cluny de Barranco siempre se realizaban una serie de actividades internas, con la presencia del alumnado y sus familiares, pero al parecer durante muchos años no habia participado de los desfiles escolares por las fiestas patrias ni por la semana de Barranco celebrada en el mes de octubre.

Una orden superior informó que desde el año 1971 las alumnas de secundaria deberían marchar por las avenidas barranquinas.


21. Portando la Bandera Nacional: 

Hace 51 años tuve el honor de portar el estandarte nacional sujeta al astil, en la escolta para homenajear nuestras fiestas patrias y la semana de Barranco

En el año 1971 las estudiantes del colegio San José de Cluny de Barranco volverían a desfilar por el distrito, siendo las alumnas del quinto de secundaria las que estarían en la escolta, pero ninguna de ellas podía marchar con la bandera bordada, cuyo peso era de aproximadamente 9 kilogramos. 

Ante ello, las meres optaron por solicitar a algunas de las alumnas de 4to. año que sea voluntaria. Cuando las que siempre eran protagonistas de los eventos descubrieron que no podían cargarla y menos caminar con ella, sugirieron que las de mayor estatura del salón lo intenten. 


Recuerdo que, entre otros nombres, las más altas de la clase eran: Juana, Doris, Alicia, Elvira, quienes creo que lo intentaron, pero al perecer  sin éxito. Fue cuando me ofrecí de voluntaria, pudiendo cargar durante todo el desfile por la av. San Martín y la av. Grau nuestro glorioso emblema, junto con las alumnas del 5to. año de secundaria.

 

En el año 1972, mientras estaba en quinto de secundaria, tanto Juana como María Luisa también portaron el estandarte, aquel año las marchas fueron en el estadio Confraternidad

Tanto para las fiestas patrias como para la semana de Barranco del mes de octubre.

En esta última, debido que a los pocos minutos del desfile se rompió la correa y casi cae la bandera, yo opté por ayudar y reemplazar a María Luisa, volviendo a portarla, sólo con mis manos.

22.         Cuatro modelos de uniformes:


Ignoro la razón, pero durante mi etapa escolar debí usar al menos cuatro diseños de uniformes. Situación similar sucedió con la indumentaria para el curso de educación física, pero no he conseguido fotografías ni recuerdo bien los diseños.

a. Yo no cursé transición en el colegio San José de Cluny, pero por una antigua fotografía proporcionada por una de mis compañeras y estimada amiga se observa que existen tirantes sobre la blusa blanca cuyo cuello culminaba en una orla, además del clásica cinta de color que identificaba al año de estudios.


b. Durante mi primer y segundo año de primaria usé el clásico uniforme de color azul con un blazer del mismo tono. El blazer es un tipo de chaqueta usualmente asignado a los escolares. La blusa tenía los botones forrados y el cuello redondeado. Los puños de la blusa debían ser visibles. Hasta 1964 teníamos una cinta alrededor de la cintura que indicaba el año que se cursaba. Al año siguiente – 1965 se suspendió el uso de la cinta.

c. Creo que fue en el año 1966 en que se modificó la forma del cuello del uniforme, incluyendo en el borde un distintivo de color azul tanto en el cuello como al final de la manga corta.


d. Me parece que fue hacia el año 1968 en que se cambió el diseño y color del uniforme por uno de color azul pastel o cian, pero manteniendo la franja azul en el cuello, con amplios tirantes en la parte frontal, y la falda con dos tableados. El cual tenían un blazer de manga larga del mismo color, así como una boina.


e. Fue en el año 1971 en que se implantó de manera preliminar el uniforme único para todos los escolares, siendo optativo hasta el año 1972, de color plomo y con tirantes más delgados pero con una franja central en la zona delantera que los sujetaba.

 

23. Alumnas mal educadas

Unos momentos poco gratos fueron aquellos en que nos castigaban a todo el alumnado por las acciones descorteces y maleducadas de algunas compañeras, desde colocar artefactos prohibidos, hacer burlas a las profesoras y a otras alumnas, faltar el respeto al asignar apodos ofensivos a las maestra, muchas veces, supuestamente de manera anónima.



Debido a la cofradía existente entre varias de ellas, era comprometedor denunciarlas, porque podría ocurrir que las rústicas decidan buscar a otro responsable, y cómo parecía existir un pacto maquiavélico entre ellas, era preferible mantenerse callada. 

¡Y pensar que a la fecha el comportamiento de muchas se mantiene igual!


Existen una serie de eventos y hechos que no he incluido por no ser relevantes o porque no los recuerdo de manera precisa. 

Hace unos meses solicité a mis compañeras, mediante un grupo virtual, si alguna de ellas deseaba colaborar con algún recuerdo significativo, pero nunca obtuve una respuesta.
 
 

 


Fotografías Derechos Reservados









viernes, 4 de noviembre de 2022

Av Arequipa en Miraflores zona oeste


La avenida Arequipa es una de las principales avenidas de la ciudad de Lima.


Se inicia en lo que corresponde a Lima Cercado, a la altura de la cuadra de la avenida 28 de Julio, cruzando los distritos de Jesús María, Lince, San Isidro y Miraflores.


Tiene 52 cuadras, y desde hace algunos años, se ha habilitado una ciclovía en la zona central.


Fue concebida con la finalidad de llegar de forma directa y rápida a los distritos de Miraflores y Chorrillos


Nominada avenida Leguía en la década de 1920, tenía al borde de la primera cuadra un imponente Arco Morisco, similar al que se encuentra actualmente en el Parque de la Amistad del distrito de Surco.


Fue inaugurada el 28 de julio de 1921, de forma que coincidía con el centenario de la independencia, siendo siempre una vía asfaltada, con señales de tránsito, la mayoría en idioma inglés, con árboles, flores y plantas en la zona central.


En la década de 1930 se le cambió el nombre por avenida de la Revolución. Modificándolo en el corto tiempo por Arequipa.


Tiene el primer paso a desnivel de la ciudad de Lima, ubicado en la intersección con la avenida Javier Prado, construido en el año 1955.


En esta vía se edificaron hermosas residencias y mansiones que ocupaban el total de la cuadra, teniendo muchas de ellas el patio trasero en la avenida Petit Thouars y/o Arenales.


A partir de la década de 1980 las hermosas residencias fueron utilizadas como centros de estudios y oficinas comerciales, y hacia principios del siglo XXI la mayoría de ellas están demolidas.


El sector miraflorino de la avenida Arequipa se inicia en la cuadra 37, justo en la intersección con la avenida. Andrés Aramburú, hasta la altura del Ovalo de la primera cuadra de la avenida Pardo.


Al igual que en las primeras cuadras, la construcción de residencias predominó pero en este caso sólo hacia el lado impar.


En el trayecto se encuentran diversos negocios como institutos de idiomas, escuelas, centros comerciales, y empresas individuales. 

También es locación para las embajadas,  locales culturales y deportivos.


Todos los predios debían tener una similar característica en cuanto al retiro y áreas disponibles para las áreas verdes.


Dependiendo del metraje, en otros casos debían tener espacios suficientes para el ingreso de los vehículos en la zona delantera.


En las calles con numeración par, las cuadras de la avenida Arequipa se inician en la intersección con la av. Santa Cruz.


Seguida por la calle Asunción de una sola cuadra, Santander, Los Ángeles, Teruel, y Andalucía.

Al igual que en la zona impar, se considera hacia el lado izquierdo una de las cuadras de la calle José Domingo Orué, antiguo sendero que conducía a los terrenos de cultivo de la antigua ciudad de Miraflores.


Continúan hacia el sur las calles García Calderón, María Parado de Bellido, Ayacucho, Tarapacá, para llegar a la avenida Angamos Oeste.

Le siguen las calles Chiclayo, Piura, Enrique Palacios, Dos de Mayo, para culminar en la primera cuadra de la Avenida José Pardo.


En la intersección con la avenida Santa Cruz existe un edificio construido hacia la década de 1960, el cual ha sabido conservar un amplio espacio para las áreas verdes.


En la esquina de la cuadra 40 se encuentra un antiguo predio muy bien conservado construido de un solo nivel, en el cual resaltan los arcos en las ventanas, así como los detalles en los techos y puertas.


Un hermoso predio de dos niveles se encuentra hacia el medio de la misma cuadra, el cual tiene algo similar a un escudo a la altura del tercer nivel.


Y en un metraje similar al predio de la misma cuadra, hacia el final se observa una hermosa residencia de dos niveles, con varias columnas en el primer piso, varios románticos balcones, y espaciosas áreas verdes alrededor.


Una gran cantidad de edificios destinados a viviendas multifamiliares fueron construidos desde la década de 1960, algunos con espacios para las áreas verdes y otros al borde de la vereda.


Un conjunto de predios con características similares de construcción se encuentran en la cuadra 44, con arcos en puertas y ventanas, así como decorados balcones.


Además de los edificios de departamentos familiares, en la zona también se encuentran pequeñas quintas con casas destinadas para viviendas, sin embargo por sus características pareciera que funcionan negocios.


Un hermoso predio con paredes redondeadas, hermosos balcones, puertas y ventanas de fierro decorados, pisos de lajas y sobre todo espacio para las áreas verdes se encuentra comenzando la esquina de la cuadra 45.


Y justo en esa esquina se ubica la zona redondeada que parece ser un torreón.


Al costado del predio mencionado se encuentra otra residencia con las mismas características arquitectónicas, pero a diferencia del anterior tiene un mirador en el tercer nivel, de características rectangulares.


La belleza arquitectónica de la av. Arequipa es visible de manera continua, en casi todas las cuadras aún permabece algún hermoso predio.


En la esquina de la cuadra 46 existe un singular predio, que pareciera haber revestido sus paredes del primer y segundo nivel con lajas.


En el lugar funcionaron diversos negocios, desde hoteles, hasta restaurantes, sin embargo los últimos años pareciera estar en remodelación.


Una importante institución de enseñanza de idiomas se encuentra en la esquina con la av. Angamos Oeste, este predio ha sufrido muchas remodelaciones por haber sido atacado en varias oportunidades por el terrorismo que vivió nuestra patria en las décadas de 1980 y 1990.


Algunos predios, como el ubicado en esquina con la calle Chiclayo tiene una singular belleza arquitectónica, difícil de apreciar por haber elevado en demasía los muros externos.


En la cuadra 51 se establecieron dos importantes organizaciones, que protegen de distintas maneras los predios ocupados.


Un importante predio destinado a una rama de las fuerzas armadas peruanas ocupa la hermosa mansión ubicada en la esquina con la calle 2 de Mayo.


Es uno de los más hermosos paseos que he realizado en el distrito de Miraflores.


En una próxima entrega, el lado impar de la avenida Arequipa.

Es de anotar que posiblemente muchos de los predios mostrados en este artículo ya no existan debido a la constante demolición para la construcción de edificios. 





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