En el distrito de Miraflores existen una gran cantidad de quintas, villas, complejos de viviendas, y otros grupos de residencias con zonas de acceso comunes para los habitantes.
Hacia principios de la década de 1940, el desarrollo inmobiliario miraflorino colaboró en el surgimiento de nuevas áreas de vivienda, siendo una de las más importante un complejo de residencias multifamiliares en la cuarta y quinta cuadra de esta calle.
Uno en particular, y no muy común en el balneario, es el ubicado entre las calles Independencia, que cruza la
calle Borgoño, y continúa hasta la calle Elías Aguirre.
Algo escondido entre los muros de las residencias, hacia finales de la década de 1940 se construyó una especie de quinta de dos bloques, con casas de dos niveles e ingresos diversos a los lados,
con un pasaje divisorio que comenzó en las calles Elías Aguirre e Independencia, con senderos laterales hacia la misma calle Chiclayo.
Al parecer, ese grupo de viviendas se realizó en varias etapas, la primera comprendía el sector entre la calle Elías Aguirre cruzó la calle Borgoño, hasta casi la mitad del sector entre la calle Borgoño e Independencia.
Según información del catastro de la Municipalidad de Miraflores, los terrenos de cada una de las casas era mayor a los 140 metros cuadrados, lo cual representaba una importante área, por ser de dos niveles.
Revisando las fotografías, al parecer con el tiempo algunas casas se independizaron los bajos con los altos, aumentando la población en esa zona del balneario.
La peculiaridad de estos predios fue que se establecieron importantes áreas verdes entre ellos, con árboles y arbustos.
Sin embargo el tiempo y los problemas de seguridad motivaron que empezaran a construirse cercos y muros, algunos de un metro y otros de dos metros, lo cual perjudico la visibilidad de la belleza arquitectónica de esos predios.
Aunque algunos predios mantienen libre ese sector de división.
Las fotografías fueron captadas durante un mismo día, y a pesar de ser durante la tarde, pocas veces me crucé con sus residentes, aunque si vi perros, gatos y aves.
En algunos de los predios se nota que han sido habilitados un tercer y hasta un cuarto nivel, inclusive sin respetar la zona del retiro alguna vez ocupado para las áreas verdes, reflejo de la situación precaria de algunos vecinos miraflorinos.
También es visible una escalera construida en el aire del retiro municipal, lo cual va contra las normas municipales.
Lo encantador de este conjunto de viviendas, es que en algunas casas se notan bellos detalles como puertas y ventanas con arcos, techos con tejas, algunos semi inclinados.
Simpáticas barandas de madera, algunas talladas.
Por lo estrecho de los pasadizos, durante la noche los senderos deben ser oscuros, para ello algunos predios han colocados pintorescas lámparas en el muro exterior o en la zona del umbral de la puerta.
Observando las zonas externas, también se notan diversas macetas con distintas plantas o pequeños árboles.
En algunos sectores son visibles antiguos bloques de cemento, que permiten que emerjan curiosas plantas entre sus divisiones.
La numeración de cada uno de los predios es algo confuso, una gran cantidad de casas tiene el mismo número siendo identificado con letras.
Caminar por este singular pasaje es reconocer el estilo de vida del residente miraflorino.
En todos los predios se distingue diversos aspectos propios de los habitantes, adornos en las ventanas, cortinas de tela, plantas caseras en pequeñas macetas, efectos propios de las casa de familia.
En algunos sectores aun son visibles las antiguas lajas colocadas cuando fue concebido este complejo de viviendas.
Y en otros sectores altas rejas de protección., la mayoría de las cuales fueron colocadas a finales dela década de 1980.
Rejas que en algunos casos impiden el paso de los visitantes.
En otros casos adecuaciones de escaleras para predios quizá independizados.
Así como senderos hacia puertas habilitadas en las nuevas construcciones.
O curiosas rejas sobre la zona del retiro municipal.
Algunos vecinos han modificado algunos aspectos de sus predios, felizmente la mayoría los embellece.
Pero sobre todo, muchas áreas verdes que refrescan la visita.
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