Calle Colón en Barranco

Cuando evocamos el distrito de Barranco de finales del siglo XIX el primer lugar en recordar es la capilla La Ermita, siendo el segundo en importancia e imponencia el Templo San Francisco de Solano ubicado sobre la plazuela San Francisco, nombrada en homenaje a dicho edificio.

En la década de 1880 un padre franciscano decidió que aquel lugar era el mejor para edificar el Templo "San Francisco Solano", construido, aparentemente, sobre los restos de una antigua y abandonada huaca barranquina.

En los registros de la Municipalidad de Barranco figura que la plazuela fue nominada San Francisco el 12 de junio de 1888, aunque por ese tiempo distaba mucho de ser considerada una plazuela.

Ese terreno siempre fue una zona frágil por estar muy cerca de unas de las acequias del cauce Talama proveniente del río Surco. 

Quizá por ello alrededor del futuro templo sólo existían predios rústicos habitados por vecinos de condición económica insegura, además de algunos árboles utilizados para el amarre de los animales.

Al parecer el templo fue construido antes de haber sido nominadas las calles alrededor, ubicándose la puerta principal sobre la nueva vía afirmada llamada Morelli Colón, por esa época de una sola cuadra.

Con la afluencia de los visitantes al templo, la zona empezó a urbanizarse, con pequeños ranchos de un piso con áreas verdes externas e internas.

La calle Colón empezó a ser reconocida a muchas cuadras a la redonda, por ser el espacio donde se decidió construir una de las pocas iglesias con cuatro torres, visibles desde cualquier lugar.

En 1895 se habilitó una plazuela cruzando la puerta principal del templo, instalando algunos faroles para el alumbrado.

Por esos años la zona poblada de Barranco estaba dividida entre los instalados cerca de la ruta del ferrocarril sobre la avenida Bolognesi, y hacia la calle Unión, las primeras cuadras de la avenida Grau y las calles Ayacucho y Sucre

Llegar al templo desde la avenida Bolognesi era sencillo, pero desde el otro extremo de la ciudad requería caminar por solitarias y no pavimentadas calles, por ello en diciembre de 1894 se solicitó a la Municipalidad de Barranco que habilitara un sendero desde la calle Colón hacia la calle Unión.

Por esa razón se habilitó la vía por la nueva calle Bregante, con salida a la calle De la Unión.

Sin embargo un sendero no fue suficiente, y se volvió a solicitar a la Municipalidad de Barranco que habilite otro sendero, esta vez por la calle Ignacio Merino, para tener acceso directo desde la avenida Grau.

En el mes de agosto de 1928 se autoriza una nueva apertura de un sendero, la actual calle Ignacio Merino, en terrenos que eran de propiedad privada.

El presente artículo reseña una breve historia de la calle Colón, en la cual es posible admirar hermosas residencias de distinto estilo, que perduran al tiempo.

Otra hermosa residencia es el Palacio Sousa, cuya puerta principal se encuentra sobre la calle Cajamarca, pero muchas de sus hermosas instalaciones son visibles desde la calle Colón.

Una de las más reconocidas es la que fue habitada por el poeta José María Eguren, cuya puerta principal se encuentra sobre la calle Colón, pero está construida en esquina con la calle San Roque.

Lenguaje sin palabras

  

Uno de los principales objetivos del lenguaje corporal es determinar la confiabilidad de la persona, especialmente en las entrevistas laborales, donde la exigencia por conocer al postulante es básica, aunque en otros momentos de la vida también es interesante descubrir cómo es realmente una persona.

En la conversación, lo resaltante a veces no es lo que se habló, sino cómo lo dijo, por ello los profesionales en psicología humana aseguran que alrededor del 10% es la locución verbal, un 40% el matiz de aquella expresión y el 50% la expresión corporal y facial.

 

Y es que siempre existen reacciones de nuestro cuerpo que la mayoría de veces pasamos desapercibidos, pero son actos que describen la verdad de nuestros pensamientos, a veces distintas a nuestras palabras.

En tiempos en que los idiomas no existían, tal como la conocemos, los seres humanos idearon como expresarse y comprenderse, en algunos casos en silencio, con sólo una mirada o un ademán.

Ese silencio que a veces usamos también sería utilizado por los otros seres que habitan el planeta Tierra, animales, vegetales y minerales podrían actuar de acuerdo a sus necesidades e instintos, en el cual incluyo  al mismo planeta Tierra, el cual procede según sus requerimientos de movimientos, calor, frio, o cualquier otra necesidad.

 

La Pandemia

Desde hace casi dos años debemos mantener ocultos los labios y la nariz, aunque muy pocas personas dirigen la mirada al movimiento nasal mientras hablamos o escuchamos, solemos observar a la boca – aun no podamos verla,  y al movimiento de los ojos.

Es de anotar que en tiempos de pandemia muchas conversaciones fueron realizadas mediante los medios virtuales, que permitía mirar a la otra persona.

 

Signos y movimientos 

La humanidad tiene en sus genes un infinito repertorio de signos, articulados inconscientemente durante toda la vida, visibles sólo delante un espejo, o ante otra persona que sea observadora. 

Expertos en lenguaje corporal han estudiado todos los movimientos humanos cuyo resumen trato de escribir en el presente artículo. 

·         El movimiento de la cabeza.

o Inclinar la cabeza desde unos mínimos grados es señal de afirmación.
o  Menear la cabeza, aunque sea ligeramente es señal de negación.
o  Levantar la cabeza es indicación de duda.
o  Tocar con los dedos la cabeza, a la altura de la sien, implica que lo que se escucha no tiene sentido, que no tiene lógica.

 

·         De la mirada

o  Mirar fijamente a los ojos implica varias condiciones, puede ser señal de respeto, pero también de desconfianza, como para indagar la validez de la respuesta.

o  Cuando en la mirada existe demasiado parpadeo significa que existe cierta inseguridad.

o  Apartar la mirada hacia los extremos del ojo, significa inseguridad,

o  Mover la mirada hacia abajo y arriba es porque se trata de inventar algo o no decir la verdad.

o  Elevar las cejas implica asombro y/o incredulidad.

 

·         Del cuerpo.

o    Inclinar el cuerpo hacia abajo significa sumisión.

o    Inclinar el cuerpo para atrás indica desconfianza.

o    Mover u ondularlo significa estar aburrido.

o    Elevarse mediante los pies simula seguridad.

o    Cambiar de posición mientras se está sentado, quiere decir que existen discrepancias con lo que se escucha.

 ·         De las manos.

o  Cruzar los dedos de forma visible es señal de buena suerte.

o  Cruzar los dedos de manera oculta, es como desear mantener un secreto.

o  Tocarse la nariz con un dedo puede ser un ademán de insulto, o no estar seguro de lo que se escucha.

o  Formar un círculo con el pulgar y el índice es señal de conformidad y aprobación.

o  Enlazar las manos sobre la cabeza significa triunfo.

o  Colocar las manos de frente, encarna que no se oculta nada.

o  Poner las manos a la altura de la cintura es indicación desafiante.

o  Poner las manos en los bolsillos es signo de indiferencia.

o  Colocar manos y brazos cruzados, implica que no nos interesa el tema.

 

Otros detalles  

·         Apariencia física

o Colores de los vestidos.

Entero: sobrio

Rayado: confuso

Multicolor: desorientador

o Zapatos

Cerrados: formal

Sandalias: informal, a menos que sea verano

o Bolso y Maletines

Pequeños: prácticos

Mediados: funcional

Grandes: dependientes

 

· Distancia en la conversación

o     Menos de 30 centímetros: familiaridad

o     Menos de un metro: amistad

o   Más de un metro: social y/o funcional

· Intensidad de la voz

o   Baja: intimidad

o   Normal: paridad

o   Alta: discusión.

Siempre es importante aprender, por ello si conocen algunos otros Lenguajes sin palabras, me encantaría conocerlos.

Fotografías Derechos Reservados

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Lenguaje sin palabras

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Población flotante en Miraflores

Calle Madrid en Miraflores

Ubicada entre las calles cuyos nombres evocan ciudades o países europeos, la calle Madrid es una de las vías más antiguas del distrito de Miraflores.

Se inicia a la mitad de la cuarta cuadra de la calle Recavarren, fue durante muchas décadas una de las vías más hermosas del balneario.

Es una calle con siete cuadras, con un primer cruce con la calle Grau, continúa hasta el Ovalo Bolognesi, siendo diagonales las cuatro esquinas lo cual reduce el perímetro de la segunda y tercera cuadra.

La tercera cuadra es atravesada por la avenida Jorge Chávez, vía que continúa de la Alameda Cristina Gálvez.

Seguida por las calles Roma, y la calle Ramón Zavala, hasta la intersección por el lado derecho con la avenida de la Aviación y el malecón Cisneros.

En la primera cuadra de esta calle ya no existe predio alguno que evoque las antiguas residencias de la década de 1940.

Sólo en la esquina con la calle Grau permanecen un par de predios edificados en la década de 1960.

Sin embargo al iniciar la segunda cuadra se mantiene un antiguo predio de principios del siglo XX, construido con techo a dos niveles con pequeños tragaluz laterales muy cerca del esquina, así como hermosas barandas de madera en los balcones y aplicaciones en las puertas y ventanas, además de una bella puerta de madera tallada para darnos la bienvenida.

A otro extremo de la misma cuadra existe un predio que pareciera haber sido modificado, pero mantiene sus escaleras de mármol, visibles desde el exterior.

Al finalizar la segunda cuadra podemos admirar una antigua residencia de dos niveles, con anchos muros en los lados laterales de la puerta, así como adornos en las ventanas, y arcos redondeados en la zona del estacionamiento vehicular.

En la zona externa mantiene un hermoso jardín con arbustos y flores, manteniendo un pequeño muro que lo separa de la vereda.

En la zona alrededor del Ovalo Bolognesi existían un par de predios construidos hacia la década de 1940, los cuales fueron demolidos hace unos meses.

Ambos con un pequeño sector para las áreas verdes, así como detallados adornos en el contorno de la puerta principal.

Por sus características parecieran que los dos fueron inicialmente de dos niveles, y a uno de ellos se le adicionó otro piso.

En medio de ambos existía un pequeño pasaje que podrían haber sido las puertas de servicio de los predios de adelante o dos casas independientes, propios de la zona.

Justo al otro lado de la Plaza Bolognesi se mantienen dos predios con diseños arquitectónicos propios de las casas alemanas, con techos a dos niveles, aplicaciones de madera en los muros, ambos son utilizados como negocios.

En la esquina de la cuarta cuadra con la calle Jorge Chávez aún existe un antiguo predio de principios del siglo XX en el cual funciona una antigua bodega.

Junto a la bodega también existe una pequeña residencia con zonas para las áreas verdes, y un segundo piso en un sector de la casa, además de un detallado adorno en el muro de la azotea.

Otra casa con similares características, se encuentra casi a media cuadra de la cuarta calle, a la cual se le ha acondicionado un muro de ladrillos que permite apreciar parte de su arquitectura así como sus plantas y arbustos.

Una singular quinta se encuentra en la cuarta cuadra, con departamentos de dos niveles, muchos de los cuales se han convertido en tres pisos, se accede gracias a un pequeño pasaje sin áreas verdes pero muchas macetas con plantas colocadas por sus residentes.

La pared lateral del imponente predio ubicado en esquina con la calle Roma es visible desde la calle Madrid, donde se puede observar los detalles arquitectónicos de las ventanas.

Hacia el final de la quinta cuadra se encuentra otro complejo de viviendas multifamiliares, siempre con espacio para los jardines para los predios ubicados al borde de la vereda, pero esta vez de tres niveles. 

Por sus características pareciera que fue edificado en la década de 1940, considerando en la arquitectura algunos detalles en las ventanas, puertas y muros.

Casi al finalizar la quinta cuadra de la calle Roma existe otro predio, el cual al parecer ha tenido varias modificaciones, por ser distintas todas las ventanas, 

pero con diferentes detalles que elevan el valor arquitectónico del predio, por los adornos en los balcones, techos, puertas, así como la variedad de arcos.

El predio está ubicado justo en esquina con el malecón Cisneros.

Culminado el recorrido de la calle con un edificio de departamentos en esquina con la calle Zavala, construido en la década de 1990, el cual tiene una amplia zona para las áreas verdes.