La historia relata que hacia el siglo XV,
los nativos miraflorinos, barranquinos y chorrillanos acudían al borde del acantilado o cerca a las playas para obtener el agua de los manantiales, porque era fuente de alimentación y aseo.
Dicha agua proveniente del subsuelo, son conocidas como aguas subterráneas, formaban parte de la filtraciones de los antiguos campos de cultivo de los terrenos al este, o de las
filtraciones naturales de los ríos.
Es Agua similar a la potable, por su calidad se podía beber y utilizar para cocinar los alimentos
Mucha de esa agua también fue utilizada por los residentes de esos distritos, y algunos otros cercanos al
mar, gracias a los pozos y al accionar de los molinos, excavando hasta 20 metros de profundidad para encontrar algún cause que les permita abastecerse para evitar ir hasta el acantilado.
Muchos de los
chorrillos en los acantilados de la Costa Verde, por efecto del constante caer del agua, formaron pequeñas grutas donde crecieron plantas y flores.
Hasta finales de la década de 1989, eran visibles esos chorrillos de agua, pero fueron desapareciendo debido a la reducción de las zonas de cultivo de los distritos de
Surco y La Molina.
Sin embargo diversos manantiales de agua volvieron a aparecer desde distintos lugares de algunas playas.
En los últimos años se puede apreciar que toda la ladera de los malecones inferiores de los distritos de Barranco y Chorrillos tiene plantas y maleza, poco probable que hayan sido regadas por las administraciones ediles.
En especial a la altura de la
calle Domeyer,
antigua ruta del funicular de Barranco, zona con un tupido follaje, parecido pero en menor cuantía al observado a la altura de la
Alameda Saenz Peña.
Manantiales en el distrito de Barranco
En la playa Barranquito
Los primeros chorrillos de agua los vi en la ladera de la
playa Barranquito, en la década de 1960.
Eras múltiples los chorrillos que emanaban desde las laderas, formando una especie de poza entre el cerro y la pista.
Sin embargo, gran parte del agua al parecer se filtraba por debajo de la pista y llegaba hasta la playa.
Una gran zona de la arena estaba cubierta por agua dulce, y parecía ser una piscina porque tendría más de 30 centímetros de profundidad.
Esa agua era bebible, sin embargo muchos la utilizan para enjaguarse y hasta lavar sus ropas de baño y toallas.
En el siglo XXI, a pesar de haberse ampliado las pistas, el cauce de agua dulce continuaba emergiendo desde cualquier lugar del acantilado hacia la playa, centralizandose hacia el área del espigón que divide Barranquito con la playa Los Pavos.
Años después, aún cuando ampliaron las pistas a seis carriles, se mantuvo aquel canal de agua dulce, que desembocaba igualmente entre la vereda y la arena, para transitar hacia el muelle, cerca a la playa los Pavos.
Es importante comentar que hacia la década de 1960 según algunos comentarios sobre el otrora club de
playa Las Cascadas, tanto para el agua de la piscina como de los servicios higiénicos fue utilizada el agua proveniente de esos chorrillos, canalizado desde una de las acequias cercanas a la
Quebrada de Armendariz.
En la Playa Barranco
Hacia el sur, en el extremo cercano al espigón que colinda con la playa Los Yuyos. pero aún en la zona de la
playa Barranco, existe otro manantial por la abundante cantidad de plantas alrededor, pero debido a que en esa zona casi no existe playa, se confunde con el agua salada, aunque es visible que se forma una especie de pozo entre las piedras.
En la playa Los Yuyos
Uno de los más profundos manantiales se encuentra en la playa Los Yuyos. Por la magnitud de áreas verdes en todo el sector junto a la vereda, se nota que es importante la cantidad de agua que emerge desde esa zona.
Y al parecer son varios los cauces que llegan a esa zona de la playa, porque existen espacios donde solo hay arena.
La profundidad de los diversos cauces es variable, en algunos casos es mínima, en otros fue necesario colocar algunos tablones para el paso peatonal.
Todas las vertientes aparecen entre las rocas, y contribuyen a que alrededor empiecen a brotar plantas.
El área donde se forma una especie de laguna se encuentra junto al espigón que lo divide de la playa Las Sombrillas, donde los veraneantes aprovechan para retirar la arena.
Playa Las Sombrillas
Desde la perspectiva se observa que estaría ubicado a la altura de la calle Independencia que divide los distritos de Barranco y Chorrillos, al final la
avenida Pedro de Osma.
Pareciera que cuando se trazaron los espacios de uno y otro distrito, lo hicieron a base de la ruta de alguna acequia.
Y es que a pesar que la calle Independencia se encuentra totalmente urbanizada, metros más al Este se encuentra un amplia área verde en el acantilado de Chorrillos, cerca al
puente Tenderini.
Pero regresando a Barranco, quizá el actual local del Estadio Unión de Barranco, fue en algún tiempo una inmensa zona de jardines.
Esa constante filtración de agua dulce provoca que toda la zona del acantilado se encuentre con diversas plantas, e inclusive algunos pozos de agua que parecieran estar estancados.
Lo peculiar de este manantial es que se pasea por la playa, aparece en medio de la arena y gira hacia el lado derecho, que pertenece a los límites del distrito de Barranco, para continuar hacia el mar.
