Fátima Rodríguez Serra: SJC 3 Recuerdos: los uniformes

martes, 15 de noviembre de 2022

SJC 3 Recuerdos: los uniformes

Mis recuerdos vividos durante los últimos cinco años de estudios son más fácles de evocar, fueron tiempos en que se consolidan las amistades, descubrimos nuestros principales intereses, y hasta nos enamoramos.

En el colegio San José de Cluny de Barranco siempre se realizaban una serie de actividades internas, con la presencia del alumnado y sus familiares, pero al parecer durante muchos años no habia participado de los desfiles escolares por las fiestas patrias ni por la semana de Barranco celebrada en el mes de octubre.

Una orden superior informó que desde el año 1971 las alumnas de secundaria deberían marchar por las avenidas barranquinas.

21. Portando la Bandera Nacional:

Hace 51 años tuve el honor de portar el estandarte nacional sujeta al astil, en la escolta para homenajear nuestras fiestas patrias y la semana de Barranco.

En el año 1971 las estudiantes del colegio San José de Cluny de Barranco volverían a desfilar por el distrito, siendo las alumnas del quinto de secundaria las que estarían en la escolta, pero ninguna de ellas podía marchar con la bandera bordada, cuyo peso era de aproximadamente 9 kilogramos.

Ante ello, las meres optaron por solicitar a algunas de las alumnas de 4to. año que sea voluntaria. Cuando las que siempre eran protagonistas de los eventos descubrieron que no podían cargarla y menos caminar con ella, sugirieron que las de mayor estatura del salón lo intenten.

Recuerdo que, entre otros nombres, las más altas de la clase eran: Juana, Doris, Alicia, Elvira, quienes creo que lo intentaron, pero al perecer sin éxito. Fue cuando me ofrecí de voluntaria, pudiendo cargar durante todo el desfile por la av. San Martín y la av. Grau nuestro glorioso emblema, junto con las alumnas del 5to. año de secundaria.

En el año 1972, mientras estaba en quinto de secundaria, tanto Juana como María Luisa también portaron el estandarte, aquel año las marchas fueron en el estadio Confraternidad.

Tanto para las fiestas patrias como para la semana de Barranco del mes de octubre.

En esta última, debido que a los pocos minutos del desfile se rompió la correa y casi cae la bandera, yo opté por ayudar y reemplazar a María Luisa, volviendo a portarla, sólo con mis manos.

22. Cuatro modelos de uniformes:

Ignoro la razón, pero durante mi etapa escolar debí usar al menos cuatro diseños de uniformes. Situación similar sucedió con la indumentaria para el curso de educación física, pero no he conseguido fotografías ni recuerdo bien los diseños.

a. Yo no cursé transición en el colegio San José de Cluny, pero por una antigua fotografía proporcionada por una de mis compañeras y estimada amiga se observa que existen tirantes sobre la blusa blanca cuyo cuello culminaba en una orla, además del clásica cinta de color que identificaba al año de estudios.

b. Durante mi primer y segundo año de primaria usé el clásico uniforme de color azul con un blazer del mismo tono. El blazer es un tipo de chaqueta usualmente asignado a los escolares. La blusa tenía los botones forrados y el cuello redondeado. Los puños de la blusa debían ser visibles. Hasta 1964 teníamos una cinta alrededor de la cintura que indicaba el año que se cursaba. Al año siguiente – 1965 se suspendió el uso de la cinta.

c. Creo que fue en el año 1966 en que se modificó la forma del cuello del uniforme, incluyendo en el borde un distintivo de color azul tanto en el cuello como al final de la manga corta.

d. Me parece que fue hacia el año 1968 en que se cambió el diseño y color del uniforme por uno de color azul pastel o cian, pero manteniendo la franja azul en el cuello, con amplios tirantes en la parte frontal, y la falda con dos tableados. El cual tenían un blazer de manga larga del mismo color, así como una boina.

e. Fue en el año 1971 en que se implantó de manera preliminar el uniforme único para todos los escolares, siendo optativo hasta el año 1972, de color plomo y con tirantes más delgados pero con una franja central en la zona delantera que los sujetaba.

23. Alumnas mal educadas:

Unos momentos poco gratos fueron aquellos en que nos castigaban a todo el alumnado por las acciones descorteces y maleducadas de algunas compañeras, desde colocar artefactos prohibidos, hacer burlas a las profesoras y a otras alumnas, faltar el respeto al asignar apodos ofensivos a las maestra, muchas veces, supuestamente de manera anónima.

Debido a la cofradía existente entre varias de ellas, era comprometedor denunciarlas, porque podría ocurrir que las rústicas decidan buscar a otro responsable, y cómo parecía existir un pacto maquiavélico entre ellas, era preferible mantenerse callada.

¡Y pensar que a la fecha el comportamiento de muchas se mantiene igual!

Existen una serie de eventos y hechos que no he incluido por no ser relevantes o porque no los recuerdo de manera precisa.

Hace unos meses solicité a mis compañeras, mediante un grupo virtual, si alguna de ellas deseaba colaborar con algún recuerdo significativo, pero nunca obtuve una respuesta.