Calle Piura en Miraflores

La calle Piura del distrito de Miraflores, fue por muchos años una de las principales vías vecinales, con viviendas unifamiliares.

Se encuentra entre las avenidas Angamos y Pardo, pero a pesar de su ubicación, es muy poco el movimiento comercial.

Su nombre es un homenaje a la ciudad San Miguel de Piura, departamento ubicado al norte del Perú, capital de la región homónima el 15 de agosto de 1532, sin embargo fue en el año 1861 cuando se le asigna la condición de Departamento de Piura

Su auge como zona residencial, se inició a raíz de la pavimentación de la avenida Arequipa, hacia principios del siglo XX.

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Mide aproximadamente 50 centimetros.

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Hasta principios del siglo XX casi no existían predios construidos en las primeras cuadras de esta calle.

La mayoría de construcciones, posiblemente eran viviendas rústicas, debido principalmente a que las cuadras no estaban señalizadas.

Fue hacia principios de la década de 1930 que se preparó un catastro para ese sendero, lo cual motivó que algunas empresas constructoras ofertaran los terrenos para vivienda.

A principios de la década de 1940, toda la zona era ofertaba como el Moderno Barrio Aristocrático, incluyendo sólo las tres primeras cuadras de la calle Piura, aunque le auge de la construcción incluyó hasta la quinta cuadra.

La oferta incluía la seguridad que todos los predios tendría abastecimiento las 24 horas del día de los servicios de agua potable así como desagüe.

Los servicios de energía eléctrica ya estaban instalados en esa zona.

Esta larga vía es cruzada por las calles Atahualpa, Coronel Inclán, Independencia, General Borgoño, Elías Aguirre y Arica, para llegar a la avenida Comandante Espinar.

Cruzando la Av. Espinar, girando hacia el lado derecho algunos metros continúa con la intersección con la calle Torre Tagle sólo hacia el lado derecho, 

para continuar con las calles General Iglesias, General Varela, Cesáreo Chacaltana (siendo diagonal por el lado izquierdo), 27 de Noviembre, para culminar en la avenida Santa Cruz.

La continuación de dicho sendero es la avenida general Córdova.

En la primera cuadra aún se mantiene una hermosa quinta, con predios que aparentan haber sido edificados hacia mediados del siglo XX, por sus detalles en puertas, ventanas, balcones así como los adornos en los techos.

Además de mantener áreas verdes tanto en la parte externa como lateral.

Otros predios de un sólo nivel, tienen características de haber sido construidos a principios de la década de 1930, por su estructura de barro y caña, como el ubicado hacia el final de la segunda cuadra, esquina con la calle Coronel Inclán.

En la esquina de la tercera cuadra de esta calle, intersección con la calle Independencia, existía esta hermosa casa que hace unos días ha sido demolida.

Algunos predios edificados en dos niveles han modificado sus estructuras, como el presentado a continuación, ubicado en la cuarta cuadra.

En esta cuadra existen otros predios que mantienen casi todas sus características originales, aún siendo una grupo de viviendas multifamiliares, preservan los detalles en las paredes, muros, techos y sobre todo sus áreas verdes.

Una vivienda singular es la ubicada también en la cuarta cuadra, cuyas ventanas tienen un peculiar diseño redondeado. 

El predio es visible desde la vía pública, y aunque se han eliminado algunas áreas verdes, aún mantiene algo similar a un cerco en uno de sus muros colindantes.

Diversas quintas con viviendas multifamiliares fueron construidas en las décadas de 1960 y 1970, algunas de las cuales no tienen áreas verdes, sin embargo, sus residentes han colocado diversas plantas en macetas para adornarlas.

En la cuarta cuadra existía un hermoso trió de singulares casas, las tres de dos niveles, con bellos balcones, y detallados adornos en las puertas y ventanas, algunas con arcos decorativos..

Lamentablemente la casa central fue demolida hace unos meses, perdiéndose la belleza arquitectónica de esa cuadra.

Al demolerse el predio no sólo desaparecer la residencia, sino también las áreas 

A la altura de la quinta cuadra, sobre la calle General Borgoño se ubica el parque Manuel Solari Swayne, uno de los pocas áreas verdes públicas de la zona.

La constancia en encontrar pequeñas quintas con predios de uno o dos niveles es constante, es una calle con muchas viviendas multifamiliares, en especial la ubicada en el número 541 con lindas plantas a ambos lados del ingreso.

Otro grupo de viviendas multifamiliares ubicado en la quinta cuadra, está al lado izquierdo, con predios individuales en el primer y segundo nivel, mantiene las áreas verdes en la zona exterior.

Justo en la zona del frente de esta quinta, se ubicada una residencia de dos niveles, con acondicionamiento de chimeneas, además de los decorados balcones y adornos en las ventanas, es uno de los predios más amplios de esta vía.

Casi al finalizar la quinta cuadra se observa otro grupo de viviendas multifamiliares, inicialmente de dos niveles, pero en este caso si se han habilitado diversas edificaciones precarias en el tercer nivel, lo cual además de modificar el paisaje, provoca la congestión y los problemas de seguridad en la ciudad.

En la sexta cuadra existe otra quinta, que por sus características pareciera haber sido edificado a finales de la década de 1960, sin áreas verdes en la zona interior y con un estrecho pasaje

Aunque al observarlo desde la acera del frente, también se nota la construcción de habitaciones precarias en el tercer nivel, además de un hermoso árbol de pino que debe tener al menos 30 años de vida.

En la misma sexta cuadra también se observan predios construidos en la década de 1970, por sus materiales, por los acabados, y sobre todo por la casi ausencia de adornos en las puertas y ventanas, aunque manteniendo las áreas verdes en el retiro.

Otros predios han modificado sus instalaciones para convertirse en negocios, pero felizmente sin haber cambiado su fisonomía principal

La calle Piura es una de las vías con la mayor cantidad de quintas multifamiliares, con áreas construidas entre 60 y 90 metros cada predio, algunos con garajes y/o áreas para el estacionamiento de los vehículos, pero siempre con simpáticos detalles ornamentales en puertas, ventanas, cercos así como en las paredes externas e internas.

Al ser una zona poco transitada, no es muy comercial, a pesar de existir muchos negocios a "puerta cerrada" al parecer por ahora es conveniente mantener los predios y no construir edificios, felizmente para el patrimonio inmueble miraflorino, porque aún podemos admirar esta hermosa residencia ubicada en la séptima cuadra, la cual tiene hasta un bello torreón.

Las cuadras octava, novena y décima prácticamente no tienen algún predio con valor monumental, la mayoría fueron construidos en la década de 1970 y 1980, pero ya fueron demolidos para edificar otro tipo de quintas verticales, pero la mayoría sin áreas verdes y con estrechas puertas de ingreso, con mínimas medidas de seguridad en casos de emergencia, sin embargo en la cuadra onceava aún se puede admirar esta bella residencia con un techo a dos aguas y adornos de madera.

Culmino este artículo con este pequeño pero detallado predio de la doceava cuadra, el cual ha sido demolido hace unas semanas, desapareciendo otra casa con características del distrito de Miraflores de la época residencial.