Fátima Rodríguez Serra: Walt Disney y la Navidad

jueves, 15 de diciembre de 2022

Walt Disney y la Navidad

Tendría 6 años cuando empecé a prestar atención en las historietas de Mickey Mouse que me entregaba mi padre, como ya había aprendido a leer, era sencillo comprender el mensaje de esas revistas, generalmente las aventuras del ratón con su familia y amigos, comenzando a descubrir las diferencias entre los seres, porque también incluían al tío abuelo con mucho dinero de unos patitos, así como un grupo de delincuentes que deseaban robárselo.

Pero la historieta también dibujaba relatos sobre la vida en una granja, en un centro laboral, en la escuela, y en cualquier otro espacio real para una niña de mi edad.

Perro Dalmata regalo de mi padre (1963) y cubrecama regalo de mi hermana (1994)
ambos modelos de la película "One hundred and one dalmatians".

Comencé a descubrir que además de las historietas, los dibujos y su escenografía estaban muy bien realizados, hasta que mi padre nos empezó a llevar al cine para apreciar las obras de Walt Disney. Algunas muy entretenidas, otras un poco lentas, al menos para mi edad, y una muy intrigante, que fue el caso de “Fantasía”.

Tiempo después, tendría 8 años cuando descubrí lo interesante que eran las revistas Selecciones de Reader´s Digest, que mes a mes mi padre adquiría, y fue en varias de ellas que empecé a descubrir el otro mundo de Walt Disney.

Walt Disney nació el 5 de diciembre de 1901, y falleció el 15 de diciembre de 1966, antes de ésa fecha yo ya había leído su biografía, reseñas de algunas de sus obras filmadas, así como su maravillosa idea hecha realidad en California: Disneyland, y el que estaba en proyecto Disneyworld. Pero el mensaje que me impacto fue:

“Las ideas proceden de la curiosidad”.

Y fue gracias a esa curiosidad en que decidí realizar la mayor cantidad de actividades que pudiera ejecutar por curiosidad.

El tiempo transcurrió, y dejé por un par de décadas las revistas Selecciones, por otras publicaciones relacionadas a mi profesión y al turismo, sin embargo, en el año 2004, por razones familiares volví a re leer una a una cada ejemplar, y encontré un antiguo artículo, leído en la década de 1960, a los pocos meses del fallecimiento de Walt, que me impactó, porque estaba relacionado con la imaginación y la Navidad.

Escrito por Walt Disney en el año 1942, publicado en la edición de Enero de dicho año, de la Revista Selecciones de Reader´s Digest, Tomo Nº 3, Nº 14.

"Alas para la imaginación"

“En las fechas próximas a la navidad, la imaginación es más viva que el resto del año. La navidad está asociada al reino de la fantasía, transportándonos a tierras maravillosas y encantadas, para evitar volver a la rutina.
La imaginación requiere ejercicio y práctica, la lectura ayuda a cultivar las facultades imaginativas.
El leer nos permite meditar, obtener mayor lucidez, para observar el valor y la belleza de lo que nos rodea.”

Sin embargo por alguna razón son justo los días alrededor de esa fecha, en que mi imaginación se estanca, no recuerdo haber realizado algo resaltante en algún mes de diciembre, quizá las circunstancias del entorno, las obligaciones laborales y compromisos familiares, truncaron durante muchos años cualquier iniciativa.

Lo curioso fue que tiempo después, visitando una biblioteca pública, decidí revisar algunas publicaciones relacionadas con Walt Disney, y llegué a la misma publicación, pero editada para otro destino, donde con el mismo título, el artículo de Walt era mucho más extenso y específico.

Publicado también en la Revista Selecciones de Reader´s Digest, en la última página y en la contra carátula, de la Edición Mundial de enero de 1942, Tomo 3 Nº 14, donde promovía la lectura de esta conocida publicación, además de comentar sobre la importancia de la imaginación.

"Alas para la imaginación"

“Una de las razones por las que me encantan las Navidades es porque brindan al espíritu la ocasión de elevarse y purificarse. En esos días muéstrese la imaginación más fresca y vivaz que en el resto del año. Es como si las Navidades liberasen, aun a los más graves y solemnes de entre nosotros, de las pequeñeces que nos encadenan a la realidad cotidiana.

Es natural que yo asocie las Navidades al reino de la fantasía, porque de él saco mis creaciones. Nuestro estudio si ha esforzado en dar al público la oportunidad de remontarse en las alas multicolores de la imaginación.
Hemos descubierto que todo hombre posee facultades imaginativas y que se alegra de poder ejercitarlas. Acaso se la hayan atrofiado por falta de uso, pero tan pronto como ve las bizarrerías del Ratón Mickey o del Pato Donald, recobran su primitiva y aletargada fuerza y lo transportan a tierras maravillosas y encantadas, más allá de los confines de nuestro mundo.

Pero casi todos necesitamos algo más que uno de esos vuelos aislados de la fantasía para no caer en el oscuro callejón de la rutina. La imaginación, para ser útil en la vida, requiere ejercicio y cultivo perseverantes. La lectura es, en mi opinión. uno de los medios más eficaces para remontarnos por encima de la diaria monotonía y para ejercitar y cultivar las facultades imaginativas.

Las selecciones del Reader's Digest son, en mi caso, una prueba elocuente de esa verdad. En sus páginas encuentra el lector estímulo para gustar la riqueza del pensamiento, para meditar, para dar vuelo a la imaginación, con el resultado de que su mente va ganando en lucidez y actividad a medida que lee. Rebasando los límites sensibles del mundo de los hechos, se alza a las regiones en que se nos revelan la significación última, el valor y la belleza de las cosas.

Es esta capacidad de remontarnos, de reconocer, a través del lente mágico de la fantasía, lo oculto e intangible, lo que afina nuestra percepción y desarrolla nuestra inteligencia,
Acaso ténganos una imaginación pobre, o encogida, incapaz de volar por los espacios de lo ideal, Selecciones del Reader`s Digest le ofrece una ocasión excelente para ejercitarse con una sana y variada gimnasia intelectual: es una revista que entretiene e ilustra: pero, a la vez, la amplia variedad y el cautivador interés de sus asuntos, el acierto en el enfoque y a presentación de cuestiones capitales, el feliz instinto de lo extraordinario y lo desusado, contribuyen a fortalecer la inteligencia y a darle elasticidad. Selecciones nos estimula a leer, no con una simple curiosidad pasiva, sino con activo interés.

Demos vuelo a la imaginación, y cultivemos aquellas lecturas que le prestan potentes alas.”

Estando de acuerdo con ambos artículos, las revistas Selecciones me permitieron viajar, conocer otras personalidades, descubrir interesantes historias de la vida real, leer de forma condensada importantes best seller, enriquecer mi vocabulario, y sobre todo conocer la historia de uno de los personajes más importantes de la historia del planeta Tierra, mi querido y siempre admirado Walt Disney.

Reproduzco ambos artículos sin permiso del autor ni de la editorial, porque deseo dar a conocer el sentir de un ser humano que procuró que sus sueños sean realidad.

Feliz año 2023